EL TRAJE NUEVO DEL EMPERADOR: Hace muchos años había un emperador que era muy arrogante con sus ropas. Se gastaba mucho dinero en sus ropas, todas las rentas en vestir bien. Siempre iba muy moderno (para esos siglos) . Solo paseaba por los campos solo para lucir sus nuevos “lookes”. Una vez, fueron unos truhanes a – donde en emperador que se pasaban por unos tejedores. El emperador, corriendo admitió que empezasen a tejer. Un día, el emperador mandó a sus criados a ver como iba su traje. Al volver, sus criados le dijeron que su traje era precioso hecha con una tela fa- bulosa. Al emperador, siempre le dijeron que su traje era maravilloso entonces quiso verlos con sus propios ojos. Cuando llegó al sótano (el lugar donde estaban haciéndole el traje al emperador), el emperador no veía absolutamente nada. El emperador se puso muy furioso, pero cuando le dijeron que el traje solo lo veían los truhanes. El emperador, admitió y se lo puso. Entonces salió a la calle para lucir su nuevo traje. Los truhanes, le decían al emperador que le sentía de maravilla . Cuando llegaron al pueblo un niño gritó: -¡¡¡¡Pero sino lleba nada!!! Pero el emperador seguia orgulloso. garoa
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CASTELLANO:
EL TRAJE NUEVO DEL EMPERADOR:
Hace muchos años había un emperador que era muy arrogante con sus ropas. Se gastaba mucho dinero en sus ropas, todas las rentas en vestir bien.
Siempre iba muy moderno (para esos siglos) . Solo paseaba por los campos solo para lucir sus nuevos “lookes”. Una vez, fueron unos truhanes a –
donde en emperador que se pasaban por unos tejedores. El emperador, corriendo admitió que empezasen a tejer.
Un día, el emperador mandó a sus criados a ver como iba su traje. Al volver, sus criados le dijeron que su traje era precioso hecha con una tela fa-
bulosa. Al emperador, siempre le dijeron que su traje era maravilloso entonces quiso verlos con sus propios ojos. Cuando llegó al sótano (el lugar
donde estaban haciéndole el traje al emperador), el emperador no veía absolutamente nada. El emperador se puso muy furioso, pero cuando le
dijeron que el traje solo lo veían los truhanes. El emperador, admitió y se lo puso. Entonces salió a la calle para lucir su nuevo traje. Los truhanes,
le decían al emperador que le sentía de maravilla . Cuando llegaron al pueblo un niño gritó:
-¡¡¡¡Pero sino lleba nada!!!
Pero el emperador seguia orgulloso.
garoa
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